El pasado 15 de octubre de 2023, XXVIII Domingo del Tiempo Ordinario, el Cardenal Ángel Fernández Artime, Rector Mayor, tras inaugurar y bendecir una imagen y nicho dedicados a san Artémides Zatti así como una exposición en honor del “enfermero de los pobres", y celebró su Primera Misa como prelado en la Basílica de María Auxiliadora de Turín donde afirmó: "Sigo siendo el salesiano que siempre he sido, aunque ahora con una responsabilidad que ya no es solo para los salesianos, sino para la Iglesia".

Al iniciar la ceremonia litúrgica el Padre Leonardo Mancini, Inspector de ICP, ofreció un elocuente saludo al Cardenal: "Nos sentimos honrados por la elección del Papa Francisco de llamar a su persona entre sus colaboradores más cercanos. Más allá del sano orgullo que sentimos por la Congregación y la Familia Salesiana, nos parece muy hermoso y significativo que haya querido que otro Hijo de Don Bosco, su décimo Sucesor, esté cerca de él, para ayudarle a guiar a toda la Iglesia… también la Iglesia necesita adquirir cada vez más la perspectiva con la que Don Bosco miraba al mundo… Sabemos muy bien que lo que se requiere es un servicio y un compromiso. Pero también hemos experimentado su coraje, su empuje, su deseo de hacer el bien, al estilo de Don Bosco".

En su homilía el Cardenal Fernández afirmo: "Don Bosco era verdaderamente un genio en tantas cosas de la pedagogía universal: todo era bueno para dar motivo a la fiesta, para suscitar emociones",

Trajó a la memoria cuando Don Bosco se negó a ser nombrado monseñor debido a dificultad que podrían tener sus muchachos para relacionarse con un prelado en el patio, pero aclaro que en su caso el nombramiento fu sorpresivo, los medios lo anunciaron a todo el mundo el 9 de julio, al verse superado por los eventos él aceptó como "una obediencia" de acuerdo espíritu de fidelidad al Santo Padre, más allá de los honores que implicaba aclaró que : "para nosotros, creyentes, la autoridad, si no es para servir, no sirve de nada".

Destaco que su lema cardenalicio: "Sufficit Tibi Gratia Mea" -Te basta mi gracia- lleva implícita la noción del acompañamiento constante de la Divina Providencia.

Subrayó que ser cardenal es un servicio a favor de la comunión de la Iglesia y en manos del Papa, quien aplica su autoridad moral en un mundo cada vez más complejo y que sufre el embate de más de treinta conflictos bélicos en el globo.

Para concluir y refiriéndose a las lecturas del día, invitó a quienes integraban la asamblea a guardar en el corazón la certeza de que Jesús es el Buen Pastor, quien procura todo para sus hijos; y les exhortó a trabajar juntos para crear un mundo de fraternidad, donde sea posible acoger juntos la invitación al banquete y fiesta de bodas que Dios hace a cada uno de sus hijos.

(Fuente ANS)