La Basílica del ‘Sagrado Corazón de Jesús’ en Roma congregó a 400 religiosos venidos de todo el mundo el sábado 3 de febrero de 202, consagrados y consagradas que se presentaron para formar parte de la peregrinación denominada ‘En el camino de la paz’, cuyo objetivo fue ‘renovar el compromiso de los religiosos con la reconciliación y la paz’; este magno encuentro se realizó en el marco de la 28ª Jornada Mundial de la Vida Consagrada celebradas el 2 de febrero, como parte de las iniciativas en preparación hacia el Año Santo de 2025 por parte de los institutos de Vida consagrada.

La Santa Misa fue presidida por S.E. el Card. João Braz de Aviz, Prefecto del Dicasterio Vaticano para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica (DIVCSVA).

Los religiosos y religiosas, desde el 1º de febrero se encontraban congregados en una gran reunión organizada por el DIVCSVA, cuyos trabajos en la primera sesión versaron sobre el tema ‘Creer en la esperanza’

El 2 de febrero, durante la solemnidad de la Presentación del Señor, reunidos en torno a Su Santidad el Papa Francisco, participaron de la 28º Jornada Mundial de la Vida Consagrada, en la Catedral de San Pedro, concelebrando la Eucaristía con el Santo Padre. Cabe subrayar que la mañana de esa jornada ellos asistieron a tres talleres, foros y diálogos dedicados a abordar las “dificultades y alegrías de la vocación a la vida consagrada”.

Retomado la narrativa de los hechos del día 3 de enero, los religiosos y religiosas, tras participar de las actividades de la peregrinación, se reunieron nuevamente en la Basílica del Sagrado Corazón para compartir un momento de oración con el que se dio por clausurado este extraordinario encuentro, el cual reunió como una sola familia a hermanas y hermanas de diverso carismas, pero al servicio de una sola Iglesia, en torno a un solo pastor: Jesucristo.

(Fuentes: INFoANS, DIVCSVA y SPSS)