El miércoles 13 de julio de 2022, el Santo Padre Francisco nombró como Miembros del Dicasterio para los Obispos a: sor Yvonne Reungoat, Superiora Emérita del Instituto de las Hijas de María Auxiliadora; a sor Raffaella Petrini, Hermana Franciscana de la Eucaristía (F.S.E.), Secretaria General de la Gobernación del Estado de la Ciudad del Vaticano; y la Dra. Maria Lia Zervino, Presidenta de la Unión Mundial de Organizaciones Femeninas Católicas (Fuente: Vaticano y ANS)

Es un hecho histórico pues es la primera ocasión que un Papa llama a mujeres a formar parte de dicho Dicasterio, ellas se integran a once miembros más entre cardenales, arzobispos y obispos.

Madre Yvonne Reungoat nació el 14 de enero de 1945 en Plouénan en Francia, hizo su profesión religiosa como FMA el 5 de agosto de 1965. Se graduó en Literatura-Historia-Geografía en la Universidad de Lyon, Francia, enseñó hasta 1980, luego fue Animadora de Comunidad en Lyon y París, (1977-1983), Vicaria Inspectorial (1978 - 1983) y Inspectora en París (1983-1989). En 1991 fue elegida Superiora de la Provincia africana "Madre de Dios" con sede en Lomé (Togo).

En el XX Capítulo General, en 1996, fue elegida Consejera General Visitadora y en 2002, en el CG XXI, Vicaria General. En 2008, en el CG XXII, fue elegida Madre General y el Capítulo General XXIII de 2014 la confirmó para un segundo sexenio, fue la 9ª Superiora General del Instituto de las Hijas de María Auxiliadora.

Desde 2018, Madre Yvonne es Presidenta de la Unión de Superiores Mayores de Italia (USMI) y a partir de 2019 es miembro de la Congregación para la Vida Consagrada y Sociedades de Vida Apostólica.

La Madre Chiara Cazzuola, actual Superiora General del Instituto de las Hijas de María Auxiliadora, dirigió el siguiente mensaje a la Madre Reungoat:

"Mientras nos alegramos con ella por este nuevo nombramiento, signo de la gran confianza de la Iglesia en su persona y en todo el Instituto, les deseamos una buena misión. Estaremos cerca de ti con cariño y gratitud. Acompañaremos este nuevo camino con la oración y el compromiso de nuestra fidelidad a la Iglesia y al Papa.

Gracias Madre Yvonne por su disponibilidad y por su pronta y serena respuesta a esta nueva llamada que, en el año en que celebramos el 150° aniversario de la fundación del Instituto FMA, es don y signo de la fecundidad del carisma.

Que María Auxiliadora preceda, guíe y acompañe su camino como lo hizo en los orígenes de nuestro Instituto hace 150 años. Con todas las Hijas de María Auxiliadora del mundo, ¡buen viaje!”