A través de Vatican News, la Santa Sede destacó el trabajo de los salesianos rumbo al Jubileo y entre los chicos menos favorecidos, entre ellos los jóvenes recluidos, esto lo hace conversando con el Padre Fabio Attard, Rector Mayor de la Congregación en vísperas del Jubileo de los Jóvenes.

Narra el artículo de Roberta Barbi lo dicho por el 11º Sucesor de Don Bosco, quien explicó el cómo se están preparando los jóvenes vinculados a Don Bosco que estarán en Roma. El Rector Mayor a la vez comentó que tras ser elegido, la primera visita pública del Padre Attard fue al centro penitenciario juvenil ‘Ferrante Aporti’ de Turín.
El Superior General de los Salesianos expresó a los medios del Vaticano que: “cerca de 5 mil jóvenes de la Congregación salesiana participarán en Roma en las celebraciones del Jubileo dedicado a ellos: el programa incluye catequesis y lectio divinae para grupos, pero, por supuesto, el culmen será el momento penitencial del viernes, la Vigilia del sábado y la Misa con el Papa León el domingo. Y luego una sorpresa: ‘Estamos preparando para ellos una media jornada de experiencia oratoria habrá ocasiones de juego, de conocimiento, de amistad, y también la escucha comunitaria de la Palabra de Dios y la adoración eucarística”
El padre Attard subrayó que tras ser nombrado Rector Mayor: “quiso visitar a los jóvenes internos del centro penitenciario juvenil Ferrante Aporti de Turín, tal y como hizo Don Bosco” en la época en que la prisión se llamaba Generale: ‘Don Bosco era un joven sacerdote recién llegado a Turín, una ciudad que entonces era como las nuestras hoy en día: llegaban jóvenes del campo, hoy llegan migrantes, incluso menores no acompañados, y, cuando se encuentran en situaciones de precariedad o desesperación, cometen errores, continúa el rector mayor. Su padre espiritual, don Giuseppe Cafasso, que era profesor de Teología moral, pero también se ocupaba de la pastoral penitenciaria, lo llevó consigo a la cárcel. Desde entonces, los salesianos tienen por tradición la capellanía del centro de menores de Turín: para nosotros no es solo una presencia pastoral importante, sino también significativa desde el punto de vista carismático’.
Barbi destaca en su artículo que el Rector mayor enfatiza el “El estilo del Buen Pastor”: “Don Bosco pasaba mucho tiempo en la cárcel que entonces se llamaba ‘Generala’, tanto que fue precisamente allí donde inventó el llamado ‘sistema preventivo’, hecho que también se recuerda en una placa que aún hoy se encuentra en un pasillo del edificio: ‘Su estilo era el del Buen Pastor, que ama a sus ovejas y entra en contacto con sus deseos’. Era capaz de crear un ambiente de confianza y respeto sin negar la parte vulnerable que había llevado al joven a equivocarse, pero sin olvidar tampoco su humanidad, que el hombre no pierde ni siquiera después de haber cometido los peores crímenes’. Además, -agregó el Rector Mayor- Don Bosco tenía muy presente que estamos creados para mirar hacia arriba, hacia el bien, lo sagrado, lo bello, lo trascendente: ‘Con los jóvenes creaba lo que hoy llamaríamos empatía, pero que él llamaba ternura, continúa. Decía que los adultos deben crear un ambiente sistémico en el que comunicar la bondad y los valores más allá del resultado’.
Se pone de manifiesto que actualmente la ‘Generale’ -‘ la Generala’- lleva el nombre de ‘Ferrante Aporti’, es otro más de los centros de reclusión para menores atestado de jóvenes migrantes y extranjeros. El Rector Mayor dijo a los medios del Vaticano: ‘Es demasiado fácil juzgar desde fuera, hay que ponerse en el lugar de los reclusos’, destacó que San Juan Bosco decía que incluso en el chico aparentemente peor hay un punto de bondad. ‘Nuestra tarea consiste precisamente en descubrirlo y hacerlo accesible a todos. Vamos a la cárcel y entre los jóvenes para compartir el don de la escucha, ¡no para dar sermones!’.
Tras el Jubileo de los Jóvenes, el Padre Fabio Attard procurará trasmitir la alegría vivida en esas jornadas a los chicos de ‘Ferrante Aporti’, y concluyó su entrevista afirmando: ‘El mensaje es este: llevar nuestra propia persona, la dimensión de bondad de la que estamos convencidos y que intentamos vivir cada día, a pesar de nuestros errores e imperfecciones siempre siguiendo el ejemplo de Don Bosco, que antes de comunicar este mensaje de bondad lo vivía en primera persona’.
(Fuente: Vatican News)



