El pasado sábado 28 de enero en el antiguo Instituto Juan Ponce de León, en un gran ambiente festivo y fraterno los miembros de los diversos grupos de la Familia Salesiana (FS), presentes en la ciudad de Puebla de los Ángeles, conmemoraron a San Juan Bosco cuya celebración oficial es el 31 de enero.
Los sacerdotes salesianos padre Juan Aarón Cerezo Huerta, Director de la Comunidad de San Miguel Arcángel Delegado local para la FS y p. Jaime Franco Esparza responsable del Oratorio Miguel Rúa y del templo de San Miguel Arcángel, encabezaron los festejos.
Iniciaron a las 5 de la tarde con un Rally cuyas 7 estaciones y pruebas hacían referencia a la persona e historia de Don Bosco, a la Santidad Salesiana, algunas eran actividades lúdicas de habilidad física como la competencia con globos, otras como el rompecabezas, el memorama, scrabble, el collage estaban más centradas en el conocimiento de la vida del “Padre y Maestro de la Juventud”, otras se centraban en la destreza artística y velocidad en armado de figura en equipo. Concluyeron esta parte cerca de la 6 de la tarde formado con sus equipos las letras del nombre de “D. Bosco”.
La santa misa fue presidida por el padre Cerezo, concelebró el p. Franco. En su homilía, que fue participada, el Padre Cerezo destacó el trabajo pastoral de Don Bosco quien asumió la espiritualidad de San Francisco de Sales sobre todo en el sentido de la amabilidad o amorevolezza, así como en el hecho de hacer consistir la santidad en estar siempre alegre. El p. Juan pidió a los miembros de la FS asumir el compromiso personal de crecer en un virtud o actitud salesiana, y esforzarse en superar alguna conducta o actitud contraria a la alegría y la caridad que no corresponde a un hijo o hija de San Juan Bosco.
Tras dialogar con la asamblea se evidenció que muchos de los presentes deseaban crecer en la paciencia hacia los demás y reducir la exigencia y/o la falta de tolerancia con su prójimo. Tras preguntar por cuanto tiempo podrían asumir este compromiso se llegó al consenso de que se hiciera un día a la vez y que a la siguiente fiesta del 2024 se evaluará si verdaderamente se había vivido aquel interesante compromiso.