El 24 de febrero se cumple un año del inicio de la guerra desatada por fuerzas de ejercito ruso contra la nación ucraniana, por tal motivo, los miembros de la Coordinación Salesiana para la emergencia en Ucrania expresaron ‘Un aniversario que todos preferiríamos no tener que recordar. Sinceramente desearíamos que esta guerra nunca hubiera comenzado. Sin embargo no podíamos tomar otra decisión sino enfrentar sus devastadoras consecuencias’.

Así el equipo de la coordinación, con sede en Varsovia, que organizó la ayuda a las víctimas de esta guerra en Ucrania y países limítrofes, presentó un resumen y balance de lo logrados en estos meses de gran sufrimiento, pero de marcada generosidad, expresan al mismo tiempo gratitud a todos sus benefactores:

Se recaudaron y destinaron a ayudas por más de 9,6 millones de euros, gracias a la aportación de 66 entidades, organizaciones y comunidades de los cinco continentes.

Los proyectos realizados y apoyados se destinaron a la construcción de albergues de emergencia, apoyo a refugiados en el exterior y desplazados internos, programas educativos para niños y jóvenes, al plan especial de emergencia para sobrellevar el invierno, así como apoyo general para la gestión de una situación tan compleja.

Por su parte Krzysztof Grzendziński, Jefe del equipo de Coordinación de Varsovia destacó:

“El Equipo de Coordinación para la Emergencia de Ucrania ha sido testigo, desde principios de marzo del año pasado, de la gran solidaridad de la Familia Salesiana hacia las víctimas de la guerra en Ucrania. Gracias al apoyo de muchas Procuras Misioneras, organizaciones salesianas, Inspectorías y el apoyo del Coordinador y Respuesta a Emergencias de la Congregación Salesiana, padre George Menamparampil, asistido por el Coordinador de DBN, Fonny Grootjans en los primeros meses y Ángel Gudiña en el último período. Gracias a esto, hemos llevado a cabo más de 100 proyectos de ayuda humanitaria, tanto ayuda material (alimentos, ropa, mantas, termos…), como apoyo psicológico, asistencia legal, clases de idiomas, educación formal y no formal y organización del tiempo libre para los niños ucranianos.

Como Equipo de Coordinación, en 2022 hemos enviado 20 transportes de ayuda humanitaria a Ucrania y estos artículos se distribuyeron principalmente a través de las comunidades salesianas en toda Ucrania.

En estrecha colaboración con otras Inspectorías salesianas polacas también estamos apoyando a los refugiados que residen en nuestro país. Después de casi un año desde que comenzó la guerra, todavía hay población refugiada de Ucrania en las casas salesianas de toda Polonia (actualmente alrededor de 250 personas), y nuestro principal objetivo en este momento es apoyarles para que se independicen y encuentren trabajo.

El proceso de búsqueda de empleo, sin embargo, es muy difícil. En algunas de las pequeñas ciudades donde se encuentran las casas salesianas las oportunidades de trabajo eran sólo estacionales o casi nulas. Siempre que era posible los salesianos daban empleo a los ucranianos en sus instalaciones: manutención del edificio, cocina, cuidado de los niños... También realizamos una encuesta sobre las cualificaciones y la educación de los refugiados que se alojan con nosotros, e intentamos adecuar los empleos a las personas dispuestas a trabajar.

Llevamos varios meses observando con satisfacción el proceso de integración de los ucranianos en la sociedad polaca, sobre todo de los niños y nos complace contribuir a su seguridad y a su correcto desarrollo.

Muchas de estas personas se enfrentan ahora a los traumas causados por los acontecimientos que vivieron, por eso hacemos mucho hincapié en que tengan a su disposición apoyo psicológico en todo momento.

Seguimos manteniendo un contacto diario con las comunidades salesianas de Ucrania e intentamos responder, con la mayor rapidez y eficacia posible a las necesidades que presentan en nombre de las personas a las que ayudan, residentes en las parroquias salesianas (greco-católicas y romano-católicas), que también incluyen a desplazados internos, escuelas, orfanatos y residentes de las zonas más atacadas por los rusos.

Además, los salesianos están llevando ayuda a las zonas orientales de Ucrania, las más afectadas por los eventos bélicos. En la actualidad, la mayor parte de los fondos se están transfiriendo para apoyar a los residentes de Ucrania bajo el cuidado de los salesianos en el contexto del invierno reinante. Las bajas temperaturas, los frecuentes cortes de electricidad, la escasez de alimentos y sobre todo los incesantes ataques en varias partes del país, están haciendo la vida muy difícil a los ucranianos, especialmente a los que han perdido sus casas y propiedades a causa de la guerra. Por eso es muy importante que nosotros, como Familia Salesiana, no dejemos de dar ayuda.

En los primeros días de 2023 llegaron dos camiones con alimentos al depósito que se estableció en cooperación con la Viceprovincia de los greco-católicos de Ucrania como parte del proyecto Winterization (entendido como Inviernización), y tenemos previsto llenar sucesivamente el almacén con los artículos necesarios para ayudar a las personas necesitadas con el apoyo de donantes y socios.

Entre las tareas del Equipo de Coordinación, además de recopilar información sobre las necesidades y transmitirla a los organismos donantes, está la de garantizar que todos los procesos relacionados con la ejecución y financiación de los proyectos sean transparentes y claros, y que la ayuda prestada esté debidamente documentada. Esto además de evitar la doble financiación de los proyectos, nos permite verificar -lo que es más importante- las necesidades más urgentes y darles prioridad.

Esto es posible gracias a una muy buena comunicación y trabajo en red entre las Procuras, el Equipo de Coordinación y los salesianos que trabajan en Ucrania.

Como responsables de la coordinación, no sólo vigilamos y apoyamos el proceso de adecuación de las necesidades con las agencias donantes, sino que también nosotros mismos solicitamos los fondos. De este modo, hemos puesto en marcha dos proyectos con fondos del Ministerio de Asuntos Exteriores polaco para la compra de alimentos y artículos de primera necesidad y cuatro vehículos para la ayuda humanitaria que se distribuirá en Ucrania.

Nada de esto sería posible sin el apoyo de donantes generosos y de corazón abierto de todo el mundo. A ellos en nuestro nombre y en el de los ucranianos, quiero agradecer la ayuda y la solidaridad que muestran a diario.’

 (Fuente: ANS)