Frescura en el Carisma’ fue lo que el Rector Mayor de los Salesianos de Don Bosco, S.E.R. Cardenal Ángel Fernández Artime, pidió la tarde del III Domingo del tiempo Ordinario 21 de enero del presente año, a todos los miembros de la Familia Salesiana de México, al intervenir sorpresivamente -como sorpresivo fue su nombramiento como prelado por parte del Papa Francisco, según narró- en las Jornadas de Espiritualidad de la Familia Salesiana 2024 de México, tras haber presidido la versión de las GSFS (JEFS-2024) a nivel Mundial desde Turín, grata e inolvidable experiencia siendo su última participación en este tipo de encuentros y que concluirá tras iniciar el Capítulo General 29 y reunirse ahí dejando se de ser Superior de los Salesianos, como él mismo lo expresó desde Italia.

Después ser convocados los delegados para la Familia Salesiana de las 4 inspectorías de México, miembros de la Familia Salesiana de MEM,MME, MMO y MEG participaron en las actividades de la Jornadas de Espiritualidad de la Familia Salesiana tanto a nivel Global (Valdocco, Turín) como Local (México); primero siguiendo a distancia las acciones en Sede de la Congregación desde el 18 hasta el 21 de enero, y a nivel local reuniéndose 97 de ellos presencialmente en el Colegio Salesiano Ángela Segovia de Serrano de Barrientos, Edo. de México y alrededor de  108-109 (en su máximo nivel de audiencia)  mediante la plataforma de videoconferencia Zoom.

Desde el día 20 contaron con la presencia de los superiores de MEM y MEG, respectivamente p. Ignacio Ocampo Uribe y Filiberto González Plasencia, de la Inspectora de MMO, Sor Socorro Chavarría –Sor Margarita Primavera Inspectora de MME, participó con un video mensaje dado a conocer el día 21 de enero-.

Además reflexionaron acerca del Aguinaldo del Rector Mayor para el 2024 y que se centra en el sueño de los nueve años para lo que contaron con dos conferencistas de gran importancia,  el primero fue el  padre Joan Lluís Playá, responsable del Secretariado del Rector Mayor para la Familia Salesiana a nivel Mundial,  quien a través de una videoconferencia grabada presentó una profunda reflexión sobre el contenido del escrito final de Cardenal Hernández Artime y su relación como mapa de ruta para animar y vivir este año pastoral.

El p. Joan invitó a soñar el sueño de Don Bosco sobre la FS y los jóvenes, a partir del Encuentro de Jesús con el pequeño Juan, la misión revelada de trasformar con amor y no con violencia el modo de vivir de sus protegidos y encomendados - que daría como resultado la obra salesiana, y que Don Bosco comprenderá plenamente casi al final de su vida- para lo cual Cristo le dio como maestra a su propia Madre María, con lo que a su vez sé nos llama a: 1) Ser verdaderos creyentes, 2) Sentirnos hijos de Dios y a 3) Mantenernos Discípulos fieles a Don Bosco y a Cristo. Destacó que todo el sueño tiene un trasfondo Evangélico y Bíblico evidente y profundo. 

Instó a aplicar con ayuda de Dios, a el método pedagógico de María: Mirar, aprender, tener paciencia, y creer en la posibilidad de la Transformación, a ayudar a los chicos a librarse de los 'lobos' y peligros que hoy nos acechan a todos como la violencia, las adicciones, el individualismo, el consumismo, la moda, etc.

De igual calidad y alcance fue la conferencia que ofreció Sor Lucrecia Uribe FMA, Delegada Mundial para Familia Salesiana del Instituto de las Hijas de María Auxiliadora quien invitó a reflexionar a los grupos sobre los retos de la FS en el acompañamiento y el testimonio de vivir como Cristo y como Don Bosco por parte de  los miembros de los diversos grupos,  de modo que provoquen a los jóvenes a soñar el sueño que Dios tiene sobre ellos, y a provocar atracción sin que sea proselitismo por el estilo feliz de vida que conlleva la vocación a lo que hemos sido llamados.

Para ello  encaminó  a los participantes a reflexionar con cuanta felicidad vivimos la vida y carisma en la FS, si cultivamos la experiencia de Dios y si se vive en lo rutinario,   si como grupo o comunidad cultivamos la espiritualidad y la comunión, si cada grupo está abierto a las necesidades de la gente, barrio y/o del mundo que nos rodea y donde actuamos y convivimos; si al mismo tiempo se vive con transparencia una vida alegre y con esperanza -oportunidad de crecer en comunión-, si se vive una formación transformadora, y que todo lo anterior permita mostrar los rasgos que revelen la belleza, de la Familia Salesiana.

El día domingo fue el cierre con la presencia del Rector Mayor quien en estilo cercano y alegre dialogo sobre su sentir acerca de la GSFS de Turín, su sorpresivo nombramiento, su deseo de volver a venir a México quizás ya no como Rector Mayor, dadas sus nuevas obligaciones, su última participación como Rector Mayor, su confianza en la providencia, su obediencia al llamado del Papa Francisco, su gusto por la comida del país como los taquitos y el tequila mexicanos, su cercanía a nuestro pueblo, por su afabilidad...

Al preguntarle sobre el papado se mostró prudente y plenamente adherido a la voluntad y compromiso del Santo Padre. Al cuestionarle sobre su expectativas afirmó "no tengo ninguna", se expreso abierto a la voluntad de Dios, a obedecer como buen hijo de Don Bosco....   pero muy especialmente externo como desde uno principio  su deseo de que la FS de México muestre con renovada "frescura", creatividad en la pastoral y la misión, que manifiesten la vigencia  y vitalidad del Carisma Salesiano, convencido de que hemos sido llamados por Dios a ser signos de su amor de la mano de María.

La Eucaristía de acción de gracias por la Jornadas la presidió el Padre Ignacio Ocampo Uribe, quien invitó a los presentes,  como lo mencionó el Cardenal Hernández,  a no tener expectativas que estuvieran fuera de la obediencia,  de vislumbrar y hacer lo posible por cumplir el sueño que Dios tiene para cada uno de sus hijos en la Familia Salesiana, y que se reflejará  el sueño en la realidad, como los profetas que son llamados como Don Bosco de estar un día juntos en el paraíso.