Hoy inicia el año litúrgico 2023 y el tiempo de preparación a la Navidad, con el prepararnos a conmemorar el nacimiento de Jesús y caminar unidos, tenemos un tiempo especial llamado Adviento, este periodo de preparación y espera, que suele durar 4 semanas con sus 4 días domingos correspondientes, y que este año 2022 inician con día 27 de noviembre de 2022 (primer domingo ) y prosigue los días 4, 11, y 18 de diciembre (2º, 3º y 4º Domingos de Adviento respectivamente), hasta llegar a la noche buena que tendrá lugar el sábado 4 de diciembre , vísperas que anteceden al 25 del mes, día solemne de Navidad, al que le corresponde este 2022 un día domingo.

En las Familias, iglesias, capillas y parroquias suele colocarse una “Corona de Adviento”, que se puede confeccionarse –siempre cuidando la seguridad para evitar incidente e incendios accidentales- con una corona de abeto tallos o ramas verdes de temporada, realizada con una base circula que puede ser un aro de madera,  o un armazón circular de diversos metales, molde etc. alambre, listón rojo,  que permitan hacer el adorno amplio donde se dispongan todos los elementos

Se puede decorar con piñas de pino, se le agregan frutos rojos secos o artificiales y cuando es posible se suele colocar algunas flores de nochebuena en cada base de las velas o cirios, si es posible y por seguridad, emplee candeleros individuales,  platos o base  de cerámica para asegurar y dispones tres cirios o velas de color morado, una rosa en la circunferencia y una blanca al centro. Cada una se  encenderá progresivamente, una cada  cada día domingo empezando por la morada, al cuarto día la rosa y el día de Navidad la blanca,  acompañando cada momento con una breve liturgia familiar que constará de  una lectura y una oración, misma que recitará el padre, la mamá o jefe de familia o alguien elegido para dicha tarea.

Las velas o cirios y sus colores corresponden al tono litúrgico que la Iglesia designa para la Misas de dicho tiempo litúrgico: los tres cirios morados indican que es un tiempo de preparación y espera, el rosa indica la alegría de la cercanía del nacimiento del Jesús y el cirio central será blanco el cual marca el culmen del día de Navidad y la presencia de Jesús entre nosotros, pueden acompañar las ceremonias familiares de cantos de Adviento o villancicos.

 La corona en forma circular representa la eternidad que corresponde a Dios, los tallos y follaje verde la esperanza, si se desea se puede agregar un listón –rojo por lo general- , que simboliza la unidad de los fieles -la Iglesia-  en su caminar hacia Dios, los frutos rojos simbolizan a aquello que obtenemos de ‘sembrar’ buenas acciones, sus primicias las cosechamos con alegría y son el resultado de cumplir con la voluntad de Dios.

Cada cirio se enciende en el domingo correspondiente y simbolizan tanto la acción de Espíritu Santo en la Iglesia que ora y realiza obras de piedad y misericordia, así como representan la luz de Jesús que avanza disipando las tinieblas del mundo.

En esta ocasión la congregación salesiana nos propone seguir un calendario ecológico con una intención por cada semana, en esta primera nos exhorta - en consonancia con la encíclica Laudato si (Alabado Seas), del Papa Francisco-, a que : Contemplemos y cuidemos nuestra casa común.

 

Día

Evangelio

Propuesta de Adviento

Semana 1

Contemplemos y cuidemos nuestra casa común

Primer Domingo de Adviento

27 de noviembre

Estad también vosotros preparados, porque en la hora que no podéis imaginar, viene el Hijo del Hombre. (Mt 24:44)

Para prepararnos a la venida de Jesús, comencemos nuestro camino de Adviento con una nueva actitud: ¡contemplación! Elijamos un rincón de la naturaleza y contemplemos la creación que tenemos delante (un árbol perenne o desnudo, las hojas caídas, el cielo, el vuelo de los pájaros, un insecto... una mascota, la mirada de una persona). Adoptemos la mirada de asombro durante todo el Adviento.

28 de noviembre

Muchos vendrán del este y del oeste y se sentarán a la mesa con Abraham, Isaac y Jacob en el reino de los cielos. (Mt 8:11)

Reflexionemos: Nuestra "cantina" es importante. Comprometámonos seriamente en este Adviento a tener cuidado con el despilfarro. Sobre todo, NO desperdiciemos comida: compremos y cocinemos sólo las cantidades adecuadas. Recemos por los pobres hambrientos y apreciemos la comida que tenemos delante.

29 de noviembre

 

Te alabo, Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque has ocultado estas cosas a los sabios y a los entendidos y las has revelado a los pequeños. (Lc 10:21)

Nuestros pequeños son muy sensibles al cuidado de nuestro planeta, la Casa Común.

Junto con ellos, nos comprometemos a no utilizar ningún tipo de artículo de plástico de un solo uso durante este periodo y posiblemente después. ¡Enseñemos a otros a hacer lo mismo! El cuidado del planeta empieza por nosotros.

30 de noviembre

 

Venid en pos de mí, os haré pescadores de hombres. (Mt 4:19)

¡Con nuestro comportamiento podemos cambiar la comunidad!

Demos un buen ejemplo a los que nos rodean. Por el cuidado de nuestra casa común, compremos y comamos alimentos producidos cerca de casa de forma ecológica: ayudaremos a reducir las emisiones de CO2, además de nutrirnos mejor. Contemplemos la belleza de los alimentos: las formas, los olores y los colores... ¡Gracias Señor!

1 de diciembre

 

Quien escuche estas palabras mías y las ponga en práctica será como un hombre sabio que construyó su casa sobre la roca. (Mt 7:22)

Nuestra casa común sufre mucho, y nosotros en ella. Recemos para que podamos tomar decisiones correctas en nuestra vida diaria.

 

Consejos para este periodo:

- En vista de la actual crisis energética, intentemos no mantener las calefacciones demasiado altas: en lugar de aumentar un grado, pongámonos un jersey más.

- Por la noche, contemplamos la luna y las estrellas y -en casa- desconectamos el router de internet y los cargadores del enchufe, no dejamos los ordenadores, televisores y otros electrodomésticos en stand-by: ahorraremos dinero y contaminaremos menos.

2 de diciembre

Hijo de David, ten piedad de nosotros. (Mt 9:27)

A partir de hoy, no desperdiciemos más el agua. El agua de sora, como la llama San Francisco, es un bien muy preciado. Siempre que sea posible, intentemos recogerla en contenedores y reutilizarla, no sólo en casa, sino también el agua de lluvia... seamos ingeniosos y encontremos la manera, ¡se puede hacer!

 

Reflexionemos: ¿cuánto material de plástico se produce sólo para ser tirado inmediatamente después de la compra y que a menudo acaba en el mar? Los envases son un verdadero problema a la hora de eliminarlos. Por eso, cuando vamos a comprar, adquirimos productos alimenticios a granel sin envases de plástico.

3 de diciembre

En tu camino, predica diciendo que el reino de los cielos está cerca. (Mt 10:7)

Si queremos cambiar el mundo, empecemos por nosotros mismos. Demos una señal concreta a nuestros amigos y familiares. Para el árbol de Navidad de este año, si ya tenemos uno, no lo cambiemos, utilicémoslo mientras podamos y decorémoslo con objetos naturales y caseros, fruto de nuestra creatividad. No compremos árboles reales que ya están destinados a morir, sino árboles que podamos plantar y cultivar