De acuerdo a un artículos de la Agencia Católica de Noticias Fides, referenciado por la Agencia Salesiana de Noticias (ANS) en una cárcel de Anjanamasina, donde se recluye a los menores infractores y ahí ‘los salesianos aplican al pie de la letra la enseñanza de Don Bosco: hacer que los niños se sientan amados’; se trata de un centro estatal de reeducación denominado ‘Trano zaza maditra’, que del malgache - idioma oficial de Madagascar- significa ‘Hogar para niños traviesos’:

Este lugar ubicado en un suburbio de la capital Antananarivo, alberga a más de 100 niños y adolescentes, los hijos de Don Bosco ya desde e hace años, distribuyen a estos muchachos comida cada domingo y/o en los días de asueto y vacaciones, además de ofrecerles diversas actividades lúdicas.

Así relató el padre Giovanni Corselli, misionero salesiano a la Agencia Fides: “La música, el teatro, el deporte, así como la formación espiritual a través de la celebración de la Misa, el catecismo y la proyección de documentales religiosos y educativos son algunas de las actividades en las que tratamos de involucrar a los menores en las distintas etapas del proceso de internamiento.

…La comunidad de Ambohitratrimo, donde se encuentra el noviciado salesiano, está a un cuarto de hora en coche de la prisión Primero mis antecesores, luego yo y ahora después de mí, se trabaja mucho con el objetivo de que los jóvenes presos se sientan lo mejor posible. Para estar más cerca de ellos, les dábamos pequeños obsequios a los distintos directores y funcionarios, así como a los guardias de la prisión, en Navidad y Semana Santa, y siempre los invitábamos a comer con nosotros y con los muchachos…

(…) En promedio hay un centenar de chicos y muchachos entre los 9 y los 17 años, pero el número de menores detenidos varía según las redadas de los policías que atrapan a los muchachos que andan tratando de robar. Muchas veces son los mismos familiares los que los ponen ahí porque no saben qué hacer con ellos.

(…) Lamentablemente, durante la semana están sujetos a estrictas normas penitenciarias que no tienen en cuenta su derecho al juego y al tiempo libre; pero el domingo pueden participar en actividades deportivas y recreativas. Dentro del Centro se organizan juegos y loterías dos o tres veces al año, pero también es una oportunidad para repartir algunas cosas útiles para la vida diaria. Los premios son ropa, material escolar, chocolate… Además, dado que las autoridades no pueden proporcionar comidas regulares y equilibradas a los jóvenes presos, los salesianos se han comprometido a distribuir comidas completas a través de los novicios, que luego comen junto con los niños.

Es una realidad delicada y compleja para manejar, que ve convivir a quienes han delinquido, con quienes tienen como única culpa vivir en la calle sin el apoyo de sus familias y también a chicos y jóvenes a quienes sus familias no pueden de gestionar, por eso en la jerga popular se le llama 'Trano zaza maditra', o 'Hogar de niños traviesos'. Hemos intentado salvar algunos de ellos, pero con algunos no lo hemos logrado, porque necesitan un seguimiento constante y no siempre tenemos la posibilidad” (Agencia Fides, 2023).

El padre Corselli es misionero en Madagascar dese hace ya casi 40 años, actualmente director de la casa de Ankililoaka, el objetivo de los salesianos es hacer que los muchachos se sientan amados, importantes para alguien y no una carga de la que liberarse, hacerles entender que no están abandonados.

(Fuentes: ANS y Agencia Fides)

Referencias

Agencia Fides. (22 febrero 2023). ÁFRICA/MADAGASCAR - Hacer que los niños se sientan queridos, importantes para alguien, no una carga de la que hay que liberarse: misioneros en la cárcel de menores de Anjanamasina. Disponible en:  http://www.fides.org/es/news/73440-AFRICA_MADAGASCAR_Hacer_que_los_ninos_se_sientan_queridos_importantes_para_alguien_no_una_carga_de_la_que_hay_que_liberarse_misioneros_en_la_carcel_de_menores_de_Anjanamasina